Hoy miércoles 15 de febrero, recibimos la lamentable noticia, de que nuestro compañero Walter Guerrero recibió una pedrada en el rostro, mientras actuaba como maquinista de un tren que se dirigía hacia Manga.

Por centímetros la piedra no le impactó en un ojo, pudiendo la lesión ser aún peor.

Este tipo de ataques son muy frecuentes, inclusive se han arrojado objetos de gran porte contra los trenes que circulan por la vía.

Mientras atrás de los escritorios de los cargos políticos parece todo muy fácil, los trabajdores ponemos todo en la cancha y esta situación marca la cruda realidad que viven los obreros del ferrocarril.

Exigimos respuesta de la dirección de la empresa para evitar que estos hechos se repitan.