Nos convida un cafecito patrón?

Los ferroviarios del sector público parecemos destinados a trabajar nuestros mejores años en pésimas condiciones laborales y cada directorio que pasa trae consigo la frase mágica “lo que no se hiso en 100 años no se puede hacer ahora” y así han desfilado por el ferrocarril con sueldos jugosos sin ningún aporte al modo ferroviario.

Podemos entender cuando se trata de reformas edilicias de gran porte donde la acumulación de años de desidia no se puede arreglar de un día para otro, pero hemos llegado al punto que se nos niega lo mínimo indispensable.

En concreto nuestra secretaría de seguridad y salud laboral a recibido la infeliz notificación de parte de la empresa que no se compraran las jarras eléctricas pedidas para las casillas de señales y guardabarreras, lugares de escaso espacio físico donde no se puede colocar una cocina y en el mejor de los casos cabe un microondas.

De esta forma nuestros compañeros que llevan la responsabilidad de la marcha de trenes tomando servicio a las 4 o 5 de la mañana en invierno con casillas en muy mal estado donde el frio,  el  viento y la lluvia eligen por donde colarse quedan privados de tomar un café o aprontar un mate en tiempo de descanso, siempre y cuando el bolsillo se lo permita ya que el sector señaleros al igual que los maquinistas vio caer un convenio salarial que compensaba las magras retribuciones que perciben por una tarea de mucha responsabilidad.

La respuesta de la empresa es que este implementó (de muy bajo costo comparado con el popular SUM o las resistencias eléctricas que abundan en instalaciones de AFE) no está reglamentado en el decreto 406/88 que rige las condiciones mínimas de trabajo y que cada empresa debe suministrar.

Con una respuesta tan ajustada a la reglamentación vigente, esperamos que en los próximos días AFE a través de su equipo de doctores ocupacionales y prevencionista se pongan  a trabajar en el relevamiento de cada casilla de señales o servicio de guardabarreras con el fin de cumplir de forma fiel el decreto 406/88.

Con el ingreso del otoño y la proximidad del invierno una solución provisoria para nuestros compañeros del sector es arrimarse al directorio de AFE en el edificio Baalbek y pedir un café exprés aunque  este implementó tampoco forma parte del decreto 406/88 es una de las tantas comodidades que tienen los que rigen los destinos del ferrocarril y creemos no habrá inconveniente de compartirlo con los trabajadores.

La única restricción tanto para nuestros compañeros administrativos del propio edificio como para el resto de los trabajadores es el uso de la leche…si un compañero nuestro desea un cortado debe comprarse la leche porque el directorio es muy estricto y  no convida.

Las condiciones laborales las vamos a conquistar…Arriba los que luchan!!!