El pasado jueves 9 de marzo, se realizó una Mesa Representativa del PIT-CNT, diversos temas se abordaron y otros fueron postergados.
Entre ellos, se dio el debate acerca de que organizaciones deberían ser invitadas para participar en el congreso del pueblo.
La polémica surgió a raíz de la invitación a CAMBADU (organización patronal de almacenes y bares), los compañeros del SUGHU (gastronómicos) plantearon que era incompatible pensar en alguna alianza con los mismos patrones que en acuerdo con la cámara hotelera los persiguen, explotan y rebajan el salario.
Así y todo, planteada la desavenencia, se porfiaba en continuar con las reuniones con esta y otras organizaciones de patrones que mantienen conflictos con sindicatos, donde el deseo de acumulación de voluntades prima sobre los principios y el componente de clase.
Fue así que la Unión Ferroviaria planteó la necesidad de aclarar los alcances de la composición del mentado congreso del pueblo y mocionamos una propuesta de Congreso del Pueblo SIN PATRONES, un congreso del pueblo que acumule en el sentido del fin de la explotación y no un congreso que lleve agua para alternativas electoralistas.
Con total éxito fuimos derrotados, el retroceso ideológico y el lavaje cultural al que ha sido sometida la clase trabajadora, ubica en algunos la perspectiva de alguna forma de concentración con los patrones.
Muchos plantean que el primer congreso del pueblo del año 1965, invitaba a título expreso a pequeños y medianos productores del campo y la ciudad, es cierto y los documentos así lo dejan claro. Pero mucha agua ha corrido por debajo del puente, la producción agropecuaria familiar ha sido esquilmada y forzada a emigrar a los pueblos y ciudades, el 92% de la población reside en nuestro país en centros poblados, el último censo agropecuario indicó la desaparición de 10.000 productores familiares en pleno auge del bloque social de los cambios, la extranjerización de la tierra creció como nunca en la historia en los 15 años del predominio del bloque social de los cambios, así también el bloque privatizo parte de la generación de la energía eléctrica, permitió mediante la ley de riego ponerle precio al agua de lluvia, no derogó las AFAP ( derogación aprobada en el congreso del PIT-CNT), firmo un acuerdo con UPM que le cedía parte del puerto de Montevideo, pulverizaba AFE y endeudo al país en 2000 millones de dólares por las obras necesarias, mediante el fonasa se enriqueció a los médicos patrones de forma nunca vista, se aplicó los decretos antipiquetes , 401 y de esencialidad a trabajadores de la educación, transporte y Ancap en definitiva toda una serie de medidas que claramente beneficiaron más a los patrones que a los trabajadores.
Debemos ser justo, el bloque social no lo hizo todo mal, pero en el balance el país se concentró aún más la riqueza y en consecuencia la explotación, las trasnacionales afirmaron su pie como nunca en nuestro territorio, las SOCIEDADES ANÓNIMAS representan el 40% de la superficie productiva, entre las empresas se destacan las forestales celulósicas, Forestal Oriental (UPM) a la cabeza con 3:565.736 hectáreas, seguida por Eufores con 670.378 hectáreas, Union Agriculture Group (UAG) con 316.251 hectáreas, Montes del Plata con 252.763 hectáreas y Agronegocios del Plata con 220.151 hectáreas, se han constituido los latifundios forestales más grandes de toda la historia uruguaya.
También en las ciudades, grandes hipermercados y cadenas monopolizan una porción mayoritaria del mercado de abastecimiento de alimentos y mercaderías de primera necesidad, estando las mismas en manos extranjeras.
Los frigoríficos también son monopolizados por transacionales y grandes grupos extranjeros, situación similar ocurre en el complejo arrocero.
Existe un proceso de concentración del poder y la riqueza en manos de grandes oligopolios transnacionales, donde los patrones locales beben de los mismos por la vía de la venta o renta de sus propiedades o de la asociación minoritaria.
Claro que sobreviven pequeños productores, tanto en el campo como en la ciudad, e inclusive han aparecido nuevas formas de relacionamiento laboral a través de unipersonales y es obvio que la pelean todos los días como los trabajadores dependientes, ahí si puede haber una alianza, pero el límite es claro, por lo menos para nosotros, el límite es si viven de su propio esfuerzo o del trabajo de otro, el límite es tanto material como ideológico, de que lado quieren estar y como se perciben, para dejarlo claro si tienen cabeza de patrón por más que no tengan empleados son como los carneros que son trabajadores pero aliados del empresario.
Es evidente que hay que desarrollar un trabajo de convencimiento, inclusive a la interna del propio movimiento obrero, cualquier duda y amplitud hacia los patrones no contribuye al mismo, marea, desdibuja, debilita.
No pensamos que el movimiento obrero es el ombligo del mundo, sabemos que existen otras formas de organización que luchan por los intereses de la clase trabajadora, luchando por la vivienda, contra el hambre, por la salud, contra distintas formas de opresión en barrios y territorios del país, se puede y ha podido conversar con ellos y lograr alianzas.
Si queremos, como se dice, elaborar un programa de la clase trabajadora en alianza con otros sectores oprimidos, debemos dejar afuera a los patrones lo sean o se sientan así, porque de fondo los intereses son contrapuestos.
Un congreso del pueblo entreverado, socava la independencia de clase, apunta a llevar agua para el molino electoral, hay que ser claros al decirlo, es más el congreso no debería concentrarse en la plataforma sino en un plan de lucha por vivienda, salud, jubilaciones dignas, pan y trabajo, claro y concreto, ahí se vería en realidad si se trata de una acto preelectoral o un genuino proceso de acumulación de fuerzas para bregar por un mundo sin explotados ni explotadores.
La polémica sigue abierta, han pasado 58 años desde el congreso del pueblo de 1965, otros se han realizado en forma posterior, el bloque de los cambios ha gobernado, la independencia de clase fue tencionada, sino construimos una plataforma propia y un plan de lucha para obtenerla seguiremos retrocediendo ideológicamente, hasta quedar como decía el tango Cambalache “ Vivimos revolca’os en un merengue y, en el mismo lodo, todos manosea’os”
PD: Cabe preguntarse si tendremos este año dos congresos, el del PIT-CNT y el del Pueblo?,